COLABORACIÓN
Por Antonio Corcino
El financiamiento para la capitalización del producto turístico dominicano ha sido determinante para los resultados de hoy. Su desarrollo y la ejecución de los proyectos turísticos e inversión que lo estructura, es un factor generador de confianza que exhibe con éxito. Garantizar que su rentabilidad y viabilidad continúen como industria, implica expandir el financiamiento hacia otras áreas que contribuyan a su consolidación.
El respaldo a áreas más allá de la simple diversificación en el desarrollo turístico tiene como objetivo no solo consolidar la rentabilidad a largo plazo, sino también asegurar la sostenibilidad de la industria. Esta perspectiva implica no solo aumentar las inversiones en la diversificación del producto turístico dominicano, infraestructuras y desarrollo de hoteles y resorts, sino también respaldar iniciativas destinadas a mejorar la calidad de vida de las comunidades receptoras y fomentar la sostenibilidad ambiental.
Ahora bien, los anuncios del financiamiento de nuevos proyectos turísticos significativos al finalizar la Feria Internacional de Turismo (Fitur-24) son un indicador positivo. La participación del sector bancario, representando más del 80%, destaca el compromiso con el desarrollo del país.
Como también esperanzador es el hecho que al finalizar la 44 de Fitur nuestra participación se confirmaron 19 nuevos proyectos turísticos que representarán una inversión cercana a los 3,500 millones de dólares y contribuirán con más de 9,000 habitaciones hoteleras, que el Banco Popular Dominicano (BPD)concluyó su participación con una inversión total de US$2,500 millones destinados al desarrollo de proyectos turísticos en el país y el Banco de Reservas más de US$2,600 millones.
Y que, además, el BPD y el Instituto de Crédito Oficial de España (ICO) ratificaron el acuerdo de financiamiento del Programa Canal Internacional, respaldando con US$25 millones a empresas españolas en República Dominicana y a sus proveedores locales, se reafirma el compromiso de contribuir al crecimiento de nuevos negocios, impuestos y empleos, por un lado, y por el otro lado, sus propósitos y formas como se destinarán esos recursos abre más oportunidades.
De la cantidad de dinero, crédito y carteras bancaria que ha sido destinada y su proyección para este año es un recurso vital para el país, su viabilidad es atractiva como, por ejemplo, con una asignación superior a los 1,000 millones de dólares en 14 hoteles, la República Dominicana es un destino relevante para los negocios de Grupo Piñero.
En ese contexto, nuestra visión está enfocada a robustecer las instituciones financieras, a agregar valor a la economía e implementar políticas de cobertura de riesgos y macroeconómicas. Crear la base para la estabilidad, la generación de confianza y el compromiso de los empresarios dominicanos, unidos a una gestión cuidadosa del sistema económico y financiero y las proyecciones positivas en el flujo turístico internacional, describen un escenario propicio para convertir al sector turístico en un próspero negocio.
Pues por nuestra condición de nación receptiva al turismo e inversión extranjera, respaldar financieramente áreas que promuevan prácticas respetuosas en el turismo y beneficien a la mano de obra es un paso alentador para la sostenibilidad. Significa, también, optimizar las acciones que contribuyan a auspiciar escenarios propicios.
De este modo, es vital diversificar la inversión en el desarrollo turístico para asegurar su sostenibilidad, como lo es determinante concentrarse en la expansión y fortalecimiento integral para maximizar nuestro rol como destino turístico competitivo y atractivo.