COLABORACIÓN
Por Rolando Hernández
El ser electo al Salón de la Fama de Coorpertown localizado en el Estado de Nuevo York no es una tarea fácil. Todos los jugadores que son seleccionados deben reunir no solo estadísticas, sino cualidades morales, es decir deben ser ejemplos a seguir por las nuevas generaciones.
Los jugadores son electos por la Asociación de Escritores de Béisbol de América (BWAA en inglés) cinco años después de haberse retirado del beisbol activo. El más reciente inmortal del béisbol que fue electo con más del 95 por ciento de los votos lo fue el dominicano, Adrian Beltré.
“Me siento bien agradecido y bien contento porque me hayan exaltado, y de verdad, voy a tratar de disfrutarlo lo más que pueda, pero todavía no se me ha metido a la cabeza que soy un Salón de la Fama”, dijo Beltré al participar en su primera rueda de prensa tras su elección al pabellón de los inmortales de las Grandes Ligas (Mejor Baseball League-MLB).
En su prolongada y fructífera carrera en el béisbol profesional Beltré fue escogido cuatro veces All-Star (Juego de Estrellas) y ganador de cinco Guantes de Oro en la tercera base, bateó para .286 de por vida con 477 jonrones y 1,707 carreras impulsadas con los Dodgers de Los Ángeles (1998-2004), Seattle (2005-09), Boston (2010) y Texas (2011-18). Sus 2 mil 759 juegos en la antesala le dejaron segundo en la lista histórica, por detrás de los 2 mil 870 de Brooks Robinson, y sus 636 dobles le ubican en el puesto número once en la tabla de todos los tiempos.
Además, tuvo un historial impecable con cinco premios Guante de Oro, dos Guantes de Platino, ganó cuatro veces el Bate de Plata y obtuvo votos para el premio de Jugador Más Valioso en ocho temporadas, quedando finalista en dos oportunidades.
Adrian Beltré, nativo del sector de Herrera, en Santo Domingo, capital de la República Dominicana con su exaltación al salón de la Fama el pasado domingo 21 de julio se unió a sus compatriotas los también inmortales del béisbol como son los lanzadores Juan Marichal (1983) y Pedro Martínez (2015), el jardinero Vladimir Guerrero (2018) y el bateador designado David Ortiz (2022).
De procedencia social humilde al igual que la mayoría jugadores de béisbol de su generación incluidos los anteriores miembros dominicanos del salón de la Fama, Beltré quien nunca estuvo involucrado en uso de esteroides, sustancias controladas y escándalos personales, con su elección al nicho de los inmortales se ha convertido en una inspiración de superación personal para los amantes del béisbol dentro y fuera de la nación dominicana. Adrian Beltré con su llegada al Salón de la Fama de Cooperstown demuestra de que ningún sueño es imposible.
El autor es periodista, educador y escritor dominicano radicado en el Estado de Nueva Jersey. Contacto rhernandez5@hotmail.com