COLABORACIÓN
Por Becker Márquez Bautista
Amigo lector, cada vez que un presidente realiza su rendición de cuentas (Presentar las Memorias de los Ministerios) ante la asamblea general los 27 de febrero de cada año, siempre incluye a los dominicanos residentes en el exterior y sus aportes a través de las remesas que envían. La diáspora dominicana, compuesta por más de dos millones de ciudadanos, representa un pilar fundamental para el desarrollo de la República Dominicana. Su presencia en países como Estados Unidos, España, Puerto Rico y otros, ha generado un impacto significativo en la economía, la cultura y en la sociedad dominicana.
Los Retos Actuales, la Integración y adaptación de la comunidad Dominicana en el exterior es fundamental para el desarrollo social y económico. Los dominicanos en el exterior enfrentan desafíos relacionados con la integración en nuevas culturas y sociedades, la adaptación a diferentes sistemas legales, educativos y laborales puede ser un proceso complejo.
Garantizar como se viene garantizando el acceso a los servicios consulares con eficiencia, la protección de los derechos de los dominicanos en el exterior es un reto constante para las autoridades. A veces la falta de documentación, el idioma, el propio desconocimiento de sus derechos pueden limitar sus oportunidades a la hora de integrarse o insertarse al tren laboral en los países que los acoge.
Fomentar la participación política de los dominicanos en el exterior es esencial para fortalecer su voz y representación, incentivar, fortalecer e impulsar la implementación del voto en el exterior y la creación de mecanismos de participación ciudadana son pasos importantes. Si bien las remesas son un motor importante de la economía dominicana, es necesario promover su uso productivo. El Banco Central de la República Dominicana (BCRD) informó que, durante el año 2024, las remesas recibidas alcanzaron la cifra US$10,756.0 millones, lo que representa un aumento de US$598.8 millones (5.9 %) en comparación con el año anterior.
El gobierno tiene que crear planes que ayude a los dominicanos y fomentar la inversión en proyectos de desarrollo y la creación de empresas en el exterior para generar un impacto mayor en nuestra economía. Facilitar el retorno de los dominicanos que desean regresar a su país y garantizar su reintegración social y económica, la creación de programas de apoyo y la validación de sus experiencias y conocimientos son fundamentales.
Promover el intercambio cultural, educativo y económico entre la diáspora y la República Dominicana. Beneficiar con becas universitarias a los hijos de los dominicanos para así tener una sociedad dominicana en el exterior mejor formada y más competitiva. La creación de redes y plataformas de colaboración puede generar sinergias y oportunidades, aprovechando el potencial de la diáspora como motor de desarrollo a través de la inversión, la transferencia de conocimientos y la creación de empleo, fomentando el emprendimiento y la innovación entre los dominicanos en el exterior.
Hay que incentivar y ampliar la participación de la diáspora en la toma de decisiones a nivel nacional y local, creando espacios de diálogo y consulta para que sus voces sean escuchadas y sus propuestas consideradas. Fortalecer la difusión de la cultura dominicana en el exterior y preservar la identidad nacional, apoyar iniciativas culturales y artísticas que promuevan el orgullo dominicano, hay que fomentar la conexión de las nuevas generaciones de dominicanos en el exterior con sus raíces y su cultura, creando programas educativos y culturales que fortalezcan su identidad y sentido de pertenencia.
La diáspora dominicana tiene un papel crucial en el futuro de la República Dominicana. Al superar los retos actuales y aprovechar las oportunidades, se puede construir un puente sólido hacia el desarrollo y el progreso de nuestra nación.
El autor tiene un Máster en Política Internacional, es Master en seguridad y defensa y fue oficial de la Armada Dominicana. Actualmente reside en Valencia, España.