La Romana, R.D.– La voz de nuestro siguiente reseñado sin duda alguna es la que lleva el clásico tono para las lecturas de noticias tanto radiales como televisivas. Y es que acto seguido tenemos contacto auditivo con su voz, nuestros sentidos nos indican que estamos a punto de escuchar un boletín noticioso.
Nos referimos a Juan Bautista Ávila Ávila, quien es conocido en los medios de La Romana como Pachy Ávila desde que el también locutor Danny Pérez, le diera una oportunidad de hacer uso de un micrófono en 1988, pasión ésa que le acompañaba desde una edad temprana ya que con regularidad su abuela materna estaba convencida que era un locutor neto.
Pero, la historia de Pachy Ávila como locutor no estaba siquiera cerca de un micrófono. Antes de entrar en materia, les hacemos constar que Pachy Ávila nació el 12 de septiembre de 1969 en el Guanito, pequeña localidad rural perteneciente al municipio de Higüey, provincia La Altagracia.
Hijo de la unión entre la Sra. Natividad Ávila Mota y el Sr. Bienvenido Ávila Cedeño, lo que le valió el curioso caso de tener dos veces el mismo apellido siendo a su vez paterno y materno, sin existencia de ningún vínculo entre ese apellido por parte de sus progenitores. Pachy es el primogénito de 4 hijos, siendo Pablo el siguiente, Víctor y Vimi Bienvenido.
Cuando Pachy contaba con apenas 7 años de edad, María Mota apodada «Doña Chichí», su abuela materna que a su vez fungió como su madre de crianza, le trajo a la ciudad de La Romana en 1977 para vivir en la barriada de Villa España, localidad en la parte Oeste de la ciudad.
Estando allí por un largo tiempo, Pachy realizó y concluyó sus estudios primarios en la escuela semioficial San Pedro, para luego acceder al Liceo Medio de Reforma (hoy politécnico Lilian Bayona) donde realizó el bachillerato. De allí pasó a la Universidad Federico Henriquez y Carvajal, donde obtuvo el título de Licenciado en Derecho en 1995.
Impactante el hecho de que Pachy nunca soñó, ni pensó, que la radio sería su gran pasión y con ésta, terminaría una carrera universitaria, educaría a sus hijos y sería un medio de vida. Citamos esto porque en realidad su anhelo era ingresar a la Academia Militar “Batalla de las Carreras”, deseos que llevaba para él su padre y de no optar por el uniforme militar, entonces convertirse en médico veterinario o ingeniero agrónomo.
Como los orígenes de Pachy radican en una vida de familia campesina, era evidente que esas opciones pululaban en la visión de su padre para con él y además del vinculante hecho de que la agricultura y la ganadería eran actividades propias de ese entorno. Obviamente, nada de eso pasó. Lo más cercano a un uniforme con similitud de rangos, Pachy lo posee ya que es oficial del cuerpo de bomberos y posee una pequeña finca ganadera.
La vida suya estaría definida dentro de la comunicación social. Nuevamente juega un rol estelar su abuela materna, Doña Chichi Mota, quien se enteró que su nieto era poseedor de un excelente timbre de voz al escucharlo leer en voz alta, las tareas que se le asignaban en la escuela, método que utilizaba para aprender la clase.
Fue su abuela y madre de crianza que lo motivó a inclinarse por la locución y para 1988, en época de graduación habían muchas actividades en el liceo, y es ahí donde comienza a dar sus primeros pasos. Era la persona ideal para realizar las presentaciones artísticas del comité de graduación y es entonces donde entra en escena su homólogo locutor Danny Pérez, quien lo invitó a su programa de radio y por primera vez, habló ante un micrófono de una cabina.
Pachy quería expandirse y comienza a visitar la emisora Radio Rutas en AM, donde después de mucho visitar y hacer amistades con el staff de locutores, le dan la oportunidad. Permanece poco debido a que hubo cambio de dirección en la mencionada estación de radio.
De allí pasó a la extinta “La Voz de la Romana” en AM (hoy 106.7 en frecuencia modulada y con el nombre de La Grande) compartiendo por varios años cabina con los locutores José Franciso Jorge, Pedro Julio Acevedo «El Pepe Pepe», Elias Manzueta y el legendario y decano de la locución romanense Don Héctor Julio Mariñez (Papito). Pachy Ávila toda su vida ha expresado de manera abierta, afable y pública, su agradecimiento a la familia Mariñez por la oportunidad de abrirle las puertas en su estación de radio.
Para 1992, Pachy retorna a Radio Rutas contratado por el veterano locutor Franklin Pimentel, director de la misma. Su estancia fue efímera y pasó entonces a laborar en Radio Juventud. Su talento fue nuevamente requerido y le ofrecen trabajar en KGM 94, esta vez de la mano del veterano locutor Victor Ramon Rosa, para leer boletines y realizar el resumen de noticias del mundo.
En 1993 probó suerte en Radio Guia, emisora propiedad de Don Modesto Espinal y como citamos en el Perfil Mediático correspondiente a Tony Quezada, el dúo realizó durante un tiempo los programas el «Sabrocan Sabatino» y «La Gran Mañana». Dos años más tarde Pachy se torna en el lector de noticias en Radio Juventud al lado de los veteranos locutores Carlos Castillo y Guillermo Rosario.
1996 sería el año en que debuta para la TV local y nuevamente a título de lector de noticias en el canal 10 de Visión Dominicana. La ebullición televisiva en la Romana estaba en su mejor momento y nace TV3 (hoy Caña TV propiedad del comunicador Leonel Peña) donde Pachy estuvo cerca de 10 años presentando las noticias locales, noticiero que marcó un antes y un después en la TV de esta ciudad.
Un punto clave a mencionar es el lapso 1997-2005 cuando pasa a complementar el equipo del programa radial «Desayuno Musical» de la FM 107.5, propiedad de Francisco A. Micheli Vicioso. Para su postrimería en la estación del Grupo Micheli, surge una llamada para ofertarle la dirección de las estaciones del Grupo Telemicro en La Romana (La Kalle 96.3 y Primera FM 88.1) donde laboró por casi 17 años. Pachy Ávila fue también corresponsal del programa “El Gran Domingo” en la ciudad de Miami, producido por el comunicador Leonel Peña.
Actualmente Pachy Ávila cuenta con el proyecto de la emisora online Radio Ávila (radiavilahd.net) y otros proyectos que se encuentran en carpeta. Su figura estuvo a cargo del Departamento de Relaciones Públicas del Ayuntamiento Municipal de La Romana, en el periodo 1998-2002, en la gestión del fenecido síndico Tomas Beltre. En el periodo 2004- 2012, Pachy fue director de relaciones públicas de la Gobernación Provincial.
Ganador en 2018 del Gran Oriente del Año, Pachy ha sido objeto de nominaciones múltiples al Micrófono de Oro del Círculo de Locutores Dominicanos. Su personalidad emana humildad, sencillez y con una abierta preocupación por los males que adolece su comunidad desde los medios de comunicación. Siempre ha utilizado su voz para defender los más sanos intereses de la clase más desposeída de nuestra sociedad, resaltando siempre los valores de la familia y el apego irrestricto a los valores cristianos y a su fe católica como hombre de Dios que es y orgulloso siempre de sus raíces.
Autodefinido como “Un locutor al servicio de la patria”, Pachy Ávila ha estado casado en dos ocasiones: Primero con la dama Maribel Ventura y luego con la distinguida Judith Baez. Nuestro reseñado es padre de 5 hijos: Su primogénita Carmen Luisa Montas, Juan Alberto Avila (también locutor y cuasi abogado), Maridalia Avila (Licenciada en Administracion de Empresas), Maria Teresa Avila (quien estudia también leyes) y el benjamín de la familia, Juan José Ávila Báez (quien está concluyendo sus estudios de bachillerato).
Pachy Ávila dice sentirse un padre orgulloso ya que sus hijos son la razón de su existencia. Solicitó establecer como parte de esta reseña, su deseo en emitir un mensaje a las nuevas generaciones de locutores alertándoles que el éxito va acompañado de mucho esfuerzo y sacrificio, y solo aquellos que se preparan para el mismo tendrán derecho a disfrutarlo.
Un saludo fraterno a Pachy Ávila, voz indiscutible de los noticieros de La Romana y ser humano lleno de bondad quien no logró ir a la Academia Militar “Batalla de las Carreras” y convertirse en un digno uniformado, pero que el destino nos lo regaló como un excelente locutor, bombero y comprometido hombre de leyes.